Gonzalo Arango
Correspondencia violada
Gonzalo Arango
Correspondencia violada
Eduardo Escobar
Uno pone a los muertos su propi rostro. Ellos son nuestros autorretratos. Cuando mueren los poetas se nos quedan vagando por los periódicos. No sé cómo nombrar este goce tal vez involuntariamente negro que se desliza entre nuestras opiniones. Se le pone al poeta, con benevolencia y con malicia, un falso rostro de hielo negro.
Literatura colombiana
Categoría
2011
Año de Edición
505
Número de páginas
978-958-8674-11-7
ISBN
Editorial CES
Editorial
Impreso
Formato
